FIGURA JURÍDICA RECOMENDADA PARA NUEVOS ARTISTAS

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La industria musical es un campo apasionante y lleno de oportunidades para aquellos/as que tienen talento y pasión por la música y quieren vivir de ella. En España, como en muchos otros lugares del mundo, hay muchos artistas musicales y profesionales del sector que tienen que decidir si trabajar como autónomos o crear su propia empresa para desarrollar sus carreras. Ambas opciones tienen ventajas e inconvenientes y en este artículo trataremos de hacer un análisis comparativo de ambas opciones para ayudarte a tomar una decisión informada.

La Figura del Autónomo/a

Ser autónomo/a en la industria musical significa que eres un/a artista independiente, un músico o productor/a que trabaja por cuenta propia, con todo lo que esto conlleva.

 

Tú serás el producto, el negociador, el gestor, el comercial, el experto en marketing, el comprador… Tú serás la abogada de tu negocio, la community manager, la copy, la electricista, la microfonista, la mensajera… en resumen, el autónomo y la autónoma son esos extraños seres capaces de hacer de todo, porque estaréis solos/as.

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Otro hándicap muy importante que tenéis que tener en cuenta es el tema de la responsabilidad. Para bien o para mal y dado que todas las decisiones las deberéis tomar por vuestra cuenta, el 100% de la responsabilidad recaerá sobre vosotros/as, hasta el punto que estaréis poniendo en riesgo vuestro patrimonio, ni más ni menos. Si hay problemas financieros, responderéis con vuestros bienes personales.

 

Dicho así entendemos que pueda parecer un mundo horrible y poco sugerente a priori, pero cuidado, hay infinidad de pros que compensarán vuestra dedicación multitarea: seréis dueños/as de uno de los bienes más preciados en el mundo empresarial, como es vuestro tiempo.

 

Una de las características más importantes del autónomo/a es la flexibilidad ya que puedes establecer tus propios horarios y trabajar a tu propio ritmo, lo que supone tener más tiempo para trabajar en tu música u otras actividades relacionadas con tu desarrollo profesional.

 

Otra de las ventajas es el tema de la inversión inicial y la burocracia. Comenzar una carrera siendo autónomo/a es mucho más económico que montar una empresa; de igual modo, la exhasperante burocracia es menor, más rápida y más simplificada.

 

Con respecto a los derechos y registros de autores, la ventaja de registrarlos con carácter personal es evidente. No es lo mismo controlar los derechos y beneficios de mi carrera profesional como artista yo mismo/a (como por ejemplo, la SGAE) que los maneje una empresa. Se cae por su propio peso.

 

Por último, nos gustaría destacar que siempre tendrás un mayor control sobre tu proceso creativo, ya que puedes trabajar de manera más independiente sin la necesidad de tener que responder a una estructura jerárquica.

La Figura de la Empresa

En post posteriores os indicaremos los pasos a seguir tanto para la creación de una empresa como para daros de alta en el régimen de autónomos/as. Ambas opciones tienen sus ventajas e inconvenientes, y la elección dependerá de las necesidades y objetivos de cada individuo.

 

A continuación, detallamos algunas de las ventajas para optar por la opción de fundar una empresa en la industria musical:

Responsabilidad limitada: Al crear una empresa, se puede limitar la responsabilidad personal frente a terceros. Es decir, en caso de que la empresa tenga problemas económicos o legales, los socios o accionistas no tendrán que responder con su patrimonio personal, sino que la responsabilidad estará limitada al capital social de la empresa.

 

Más oportunidades de financiación: Al tener una estructura empresarial, se pueden acceder a más oportunidades de financiación que como autónomo, ya que los inversores y los bancos suelen tener más confianza en las empresas que en las personas físicas. Igualmente, si la empresa no es de carácter unipersonal, contarás con la inversión que cada socio aporte al capital social.

 

Crecimiento y expansión: Las empresas tienen más facilidad para crecer y expandirse que los autónomos, ya que pueden contratar a más empleados, abrir nuevas sucursales o diversificar su oferta de productos o servicios.

 

Ventajas fiscales: Las empresas tienen algunas ventajas fiscales que los autónomos no tienen, como la posibilidad de deducir ciertos gastos y la aplicación de un tipo impositivo más favorable en algunas situaciones.

 

Mejora la imagen frente a terceros: Tener una empresa da una imagen más profesional y seria frente a clientes, proveedores, inversores y otros actores de la industria, lo que puede facilitar el acceso a nuevos proyectos y oportunidades.

Y entonces, ¿me hago autónomo/a o creo una empresa?

La decisión de si es preferible crear una empresa o hacerse autónomo en la industria musical depende de muchos factores, como el tipo de actividad que vayas a desarrollar, el nivel de ingresos previstos, el nivel de responsabilidad y el número de personas que quieras involucrar en tu proyecto.


Si estás empezando en la industria musical y no tienes un gran capital inicial, es probable que la opción más adecuada sea empezar como autónomo/a. Al ser autónomo/a, tendrás menos trámites administrativos y fiscales y podrás centrarte en tu trabajo artístico. Además, al principio es probable que no tengas muchos ingresos, por lo que pagar la cuota mensual de autónomo/a será más asequible que los costes de constituir una empresa.


Por otro lado, si tu proyecto musical implica la colaboración de varias personas o requiere una inversión importante, puede ser más conveniente constituir una empresa. De esta forma, podrás limitar tu responsabilidad y compartir la carga financiera con otros/as socios/as.


En cualquier caso, es recomendable asesorarse bien por un/a profesional antes de tomar una decisión, ya que cada caso es único y hay que analizar todas las opciones posibles para tomar la mejor decisión.